Petro defendió la continuación de las relaciones diplomáticas entre Colombia y Venezuela
El mandatario les respondió a algunas voces críticas que le piden mayor contundencia ante el régimen de Nicolás Maduro, sobe todo luego de la detención de la opositora María Corina Machado.
Según el presidente Gustavo Petro, la ruptura de los lazos diplomáticos entre Colombia y Venezuela es solo una “terca idea” que podría “condenar al hambre” a millones de personas que habitan en la frontera entre ambos países, que sobrepasa una longitud de más de 2,2 mil kilómetros.
Así lo expresó el mandatario en su cuenta de X, en una publicación en la que respondió a las críticas de algunos sectores opositores que le pidieron “acción contundente”, como lo hizo el presidente del Senado, Efraín Cepeda, quien remarcó que Colombia no puede “seguir con una actitud pusilánime”.
Petro calificó al llamado de atención como una “terca idea de condenar al hambre a 14 millones de colombianos que viven en la frontera y desatar un inmenso éxodo de migrantes hacia América del sur y norte” (sic). Para el jefe de Estado, reaccionar drásticamente perjudicaría a las personas.
“Las acciones contundentes no las debe tomar un gobierno contra otro”, señaló el presidente, argumentando que “la política interna de un país la determina su propio pueblo”. No es la primera vez en que se basa en las posibles consecuencias de una ruptura de relaciones para hacer notar su postura.
El 8 de enero, Petro respondió a unas declaraciones de la exvicepresidenta y excanciller Marta Lucía Ramírez. La exfuncionaria del gobierno de Iván Duque fue una de las más de quinientas firmantes que en una carta abierta afirmaron que la asistencia de Colombia al juramento de Maduro “legitima” su administración.
“Asistir a este acto no solo legitima un régimen que viola sistemáticamente los derechos humanos, sino que socava nuestra autoridad moral para defender la libertad y la democracia”, se lee en la misiva, dirigida al mandatario, al Congreso de la República y a la Comisión Asesora de Relaciones Exteriores.
Ramírez, además de ser parte del reclamo, participó en una entrevista en la emisora Caracol Radio en la que señaló que, si el embajador de Colombia en Caracas, Milton Rengifo, asiste a la posesión de Maduro, el gobierno de Petro está “respaldando” una “ruptura democrática en Venezuela”.
En respuesta, el jefe de Estado dijo, en un mensaje en su cuenta de X, que “el mayor error colombiano sería repetir el error de Duque y Ramírez”, haciendo alusión a la ruptura de relaciones diplomáticas que la Casa de Nariño mantuvo con el Palacio de Miraflores en un intento de aislar a Maduro.
Colombia mantiene relaciones con Venezuela, aunque no reconoce los resultados que dan a Maduro como ganador
La política exterior de Duque con Venezuela implicó cierres de fronteras, apoyo a la impotente presidencia interina del opositor Juan Guaidó y un llamado “cerco diplomático” que llevó al expresidente a exclamar en febrero de 2019 que “a la dictadura de Venezuela le quedan muy pocas horas”.
Según Petro, las consecuencias fueron, además, “entregarle la frontera a la mafia y condenar al hambre a colombianos y venezolanos”, lo que derivó en “desatar el éxodo de los pueblos hacia el norte”. “No es ninguna solución racional”, subrayó el jefe de Estado tres días antes de la posesión de Nicolás Maduro.
“El destino de Venezuela es de las y los venezolanos. Colombia debe ayudar, si se le invita, a todo esfuerzo de diálogo y de construcción democrática y pacífica en el vecino país”, concluyó el primer mandatario, cuya presencia en la toma venezolana sigue en debate en el interior del Ejecutivo.
La publicación del presidente llega en medio de una gira internacional en la que el excandidato presidencial Edmundo González Urrutia, a quien la oposición venezolana y varios países reconocen como ganador de los comicios de julio de 2024, busca apoyo de cara a una posesión paralela el 10 de enero.
Petro no ha manifestado su apoyo a González, cuyo yerno fue detenido por las autoridades oficialistas el mismo día en el que Maduro anunció el arresto de siete extranjeros calificados como “mercenarios”, pero ha expresado que sin actas de las elecciones no puede reconocer un mandato del chavista.
El canciller colombiano, Luis Gilberto Murillo, ha sostenido la misma postura. Aun así, está previsto que Rengifo asista al acto del 10 de enero, un día después de protestas convocadas por María Corina Machado, la opositora que no pudo competir en las elecciones por una inhabilidad impuesta por el régimen.
Tras las manifestaciones, en la antesala del acto de posesión de Maduro como presidente de Venezuela, el canciller Luis Gilberto Murillo emitió un comunicado oficial en el que en nombre del Gobierno colombiano expresó su “profunda preocupación” por las arbitrariedades del vecino país.
En relación con el proceso electoral venezolano, el ministro de Exteriores señaló que “no brindó garantías a los participantes ni se realizó de manera transparente de acuerdo con lo establecido en las leyes y la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. No fueron unas elecciones libres”.
Murillo insistió en que “sin actas públicas ni transparentes, Colombia no reconoce los resultados electorales”, y confirmó que el presidente Gustavo Petro no asistirá al acto de posesión de Maduro, aunque sí lo hará el embajador de Bogotá en Venezuela, Milton Rengifo.