“No hay que temerle a los derechos”: MinTrabajo a críticos de la reforma laboral

Desde la sede de la Embajada de Colombia en Waghington D.C. en Estados Unidos, la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, conversó en primicia con La W a propósito de su participación en la Conferencia Interamericana de Ministros de Trabajo.

Sobre su objetivo en este evento, la ministra aseguró que se busca que los procesos de reforma laboral en Colombia “estén a tono con todo el continente”. Además, reveló, Colombia tomará la presidencia del grupo de trabajo debido a que el próximo año será el país sede de esta conferencia.

Por otro lado, sobre cómo ve este nuevo intento por sacar adelante la reforma laboral en el Congreso de la República, Ramírez aseguró que es una oportunidad “especial y grandiosa”, pues hoy se tiene a los coordinadores de la ponencia y a un comité de ponentes pluripartidista que, “con el debate amplio y democrático que se abre, vamos a poder mejorar nuestra propuesta de reforma laboral”.

La ministra recordó que esta reforma tiene tres capítulos especiales. El primero, explicó, “es (sobre) los principios en que nos apoyamos fundamentalmente en los artículos 25 y 53 de la Constitución Política. A esto le adicionamos los derechos fundamentales, que son los cinco principios que tiene la OIT (Organización Internacional del Trabajo)”.

Un segundo capítulo, según la ministra, tiene que ver con el trabajo individual, “donde están los temas de estabilidad laboral que, para nosotros, son fundamentales porque van a permitir que muchos trabajadores que hoy están en la informalidad puedan avanzar ese proceso de formalización y de seguridad social –como es el caso de los campesinos con el contrato agropecuario y del trabajo doméstico– a través de la extensión de esta modalidad de contrato”.

En ese sentido, la ministra aseguró que con el sector de las plataformas digitales se han hecho grandes debates “y una gran estrategia de concertación”, así como una estrategia de transición energética “ligada y articulada directamente a la reconversión laboral y a los empleos verdes y azules”.

Además, la ministra indicó que en estos debates se ha abordado la inclusión de la población en situación de discapacidad, así como la no discriminación y las políticas hacia la equidad de género.

El tercer y último capítulo, añadió la ministra Ramírez, tiene que ver con el proceso de trabajo conectivo, que ha sido uno de los de mayor resistencia.

“Esto está ligado articuladamente a los procesos económicos, estamos trabajando la política del gobierno”, indicó.

¿La reforma laboral resolverá el problema de la informalidad?

Sobre qué decir a quienes señalan que la reforma laboral no resuelve el mayor problema que existe, es el trabajo informal, la ministra afirmó que ninguna reforma laboral o ley lo ha resuelto.

“Lo que han hecho es recortar y destruir los derechos. Lo que nosotros estamos planteando hoy es que hay una manera distinta y es asumirla como una política integral de Gobierno a través de un proceso económico que tiene que ver en la reindustrialización”, explicó.

Por eso, la ministra insistió en la necesidad de reconocer el campo como motor de desarrollo, por lo que “esta economía popular, solidaria y comunitaria es donde está el eje”.

De este modo, la ministra sostuvo que la reforma actual busca dar un “giro total”, ya que no se perseguirá a la informalidad, sino que se aumentarán los ingresos de estas familias: “Sobre todo, vamos a trabajar para que se dignifique a través del acompañamiento del crédito público y del apoyo tecnológico”.

“No hay que tenerle miedo a los derechos”

Sobre qué responderles a los empresarios a los que les preocupa el proyecto eleve los costos de contratación y, por ejemplo, impedirá que se realicen despidos de trabajadores que no estén cumpliendo con sus tareas asignadas.

“Les podemos los empresarios que no tengan miedo. Esta es una reforma de derechos y no hay que tenerle miedo a los derechos, lo que hay que hacer es profundizarlos porque, cuando hay un bien, el derecho crece a toda la sociedad”, repuso la ministra Ramírez.