ONU condenó el asesinato de firmantes de paz en Catatumbo y exige cese de la violencia
La Misión de Verificación de la ONU en Colombia condenó el asesinato de cinco firmantes del acuerdo de paz en el Catatumbo, una región golpeada por la violencia armada.
La Misión de Verificación de las Naciones Unidas en Colombia, encabezada por Carlos Ruiz Massieu, emitió una contundente condena tras los asesinatos de cinco firmantes del acuerdo de paz en la región del Catatumbo, Norte de Santander.
En su pronunciamiento, Ruiz Massieu instó a los grupos armados a cesar las acciones violentas y subrayó que “la verdadera voluntad de diálogo pasa por respetar la vida de quienes optaron por la paz”.
Entre las víctimas se encuentran Pedro Rodríguez Mejía, Jhan Carlos Carvajalino Quintero, Albeiro Díaz Franco, Yurgen Martínez Delgado y Jhon Freddy Carrascal, todos excombatientes de las Farc en proceso de reincorporación, vinculados al Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación (ETCR) El Negro Eliécer Gaitán en Tibú. Los crímenes ocurrieron el 16 de enero de 2025 en los municipios de El Tarra, Convención y Teorama, bajo circunstancias similares: ataques directos de grupos armados en zonas rurales.
De acuerdo con informes de la Defensoría del Pueblo, como la alerta temprana 026 de 2024, los territorios donde ocurrieron los asesinatos están controlados por el Frente 33 del Bloque Magdalena Medio, el ELN y bandas locales. Estas organizaciones mantienen disputas territoriales que exponen a la población civil y, especialmente, a los firmantes de paz, a riesgos constantes de violencia.
La Defensoría también destacó el aumento de las amenazas contra personas en proceso de reincorporación, señalando que las acciones de estos grupos armados violan gravemente los derechos a la vida, la seguridad y la libertad. En lo que va de 2025, ya se registran seis firmantes de paz asesinados, una cifra alarmante que refleja un recrudecimiento de la violencia.
Los asesinatos de líderes que han optado por la reconciliación plantean serios desafíos al proceso de implementación del acuerdo de paz firmado en 2016. La Misión de Verificación de la ONU destacó que garantizar la vida de quienes decidieron dejar las armas es fundamental para construir confianza en las comunidades y fortalecer la voluntad de diálogo en el país.
Ruiz Massieu hizo un llamado a las autoridades para reforzar las medidas de protección en estas zonas y enfatizó la importancia de que las partes involucradas en el conflicto respeten los compromisos adquiridos.
"Proteger a la población civil y a los firmantes de paz no es solo una obligación legal, sino un pilar para alcanzar una paz sostenible“, concluyó.