Tras la escalada de violencia en el Cauca, la Defensoría del Pueblo adoptó nuevas medidas
La defensora Iris Marín escuchó a las comunidades más golpeadas por la reconfiguración del conflicto en el norte de la región caucana.
Iris Marín, Defensora Nacional del Pueblo. Créditos: Defensoría Nacional del Pueblo.
La Defensora Nacional del Pueblo, Iris Marín, ante la escalada que vive el país, llegó al departamento del Cauca, que no escapa a este flagelo, y escuchó a las comunidades más afectadas por la reconfiguración del conflicto armado. En su recorrido por el norte de la región, Marín anunció que se adoptará un plan específico para afrontar la crisis en este territorio.
La funcionaria pudo evidenciar, durante cuatro días junto a su equipo, cómo las localidades de Cajibío, Inzá, Toribío, Páez, Totoró, Suárez, Argelia y Tacueyó siguen padeciendo el reclutamiento de menores y ataques de grupos armados contra organizaciones sociales, comunidades indígenas y campesinas.
“Estas poblaciones están afectadas por la reconfiguración del conflicto”, dijo Marín.
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A este panorama se suma la constante presencia de los grupos armados no estatales, el aumento de los cultivos lícitos y la ausencia e incumplimiento institucional. Así como un riesgo latente por las disputas territoriales entre las disidencias de Iván Mordisco, el Frente 57 y el ELN.
“Hemos decidido adoptar un plan específico como Defensoría del Pueblo para reforzar nuestra presencia, que ya es grande y cuenta con un equipo muy comprometido, pero que requiere un refuerzo en cuanto al tipo de acciones encaminadas a atenuar el gran riesgo y ojalá eliminarlo del reclutamiento forzado, así como hacerle frente al riesgo permanente en el que están las organizaciones sociales y las comunidades indígenas”, enfatizó la Defensora.
De igual manera, Iris Marín hizo un llamado a las autoridades y gobernantes a dar una respuesta efectiva desde los niveles locales, regionales y nacionales a la falta de respeto por el principio de distinción por parte de las estructuras armadas ilegales.
Ya en un reciente informe, la Defensoría del Pueblo había reportado que en 2024 el Cauca ocupó el primer lugar en materia de reclutamiento de menores por grupos armados, con 300 casos; uno de los flagelos que urge combatir en esta región.
