Cientos de parejas, listas para marcar el inicio del matrimonio igualitario en Tailandia
El comienzo de la legalidad para las uniones maritales del mismo sexo es un hito para el país asiático, y significa que las parejas homosexuales y heterosexuales contarán con los mismos derechos.
Cientos de parejas LGTBI tienen previsto casarse este jueves, 23 de enero, en un evento colectivo en Bangkok que marcará la legalización de las uniones del mismo sexo en Tailandia, el primer país del Sudeste Asiático y el tercero de Asia en reconocer el matrimonio igualitario.
El colectivo Bangkok Pride indicó este miércoles, a través de su página de Facebook, que más de trescientas parejas están apuntadas para registrar sus matrimonios mañana en un evento colectivo en la capital tailandesa, a la vez que se espera una jornada masiva de registros en más de ochocientos distritos en todo el país.
Tailandia legalizará las uniones igualitarias después de que Taiwán y Nepal lo hicieran en 2019 y 2023, y de que India y Singapur despenalizaran la homosexualidad en 2018 y 2022, respectivamente, lo que forma parte de las conquistas del colectivo en Asia, donde activistas consideran que tienen más visibilidad que derechos.
Las bodas igualitarias podrán celebrarse tras la aprobación por una amplia mayoría en el Parlamento en junio, y el Gobierno de Tailandia espera impulsar con ello su atractivo turístico, después de que el país recibiese a más de 35 millones de extranjeros en 2024 y ratificara su posición de líder en la región.
En Bangkok, además de las ceremonias previstas para mañana, activistas LGTBI organizaron un seminario sobre derechos humanos e igualdad y un concierto al final de la tarde, en el que se esperan los discursos de la primera ministra, Paetongtarn Shinawatra, y el ex primer ministro Settha Thavisin.
Una vez que termine la primera jornada, se tiene previsto que las autoridades informen del total de matrimonios registrados el jueves, un dato que —según han dicho organizadores en el pasado— podría valer para obtener un récord Guinness por el mayor número de uniones igualitarias.
Mientras el colectivo ha destacado la necesidad de “crear comprensión” sobre la importancia de la igualdad de derechos y de encontrar “formas de apoyar a futuras parejas”, en las redes sociales abundan publicaciones —algunas hechas por el propio Gobierno— que vinculan al matrimonio igualitario con el turismo.
Con la puesta en marcha del matrimonio igualitario, las parejas del mismo sexo tendrán los mismos derechos que disfrutan las heterosexuales, entre ellos los relacionados con la herencia, desgravaciones fiscales y adopción de niños.
Sobre este último punto, el Gobierno está revisando el marco legal de la subrogación, no permitida en el país a los extranjeros, sin que haya certeza de algún cambio en la legislación, que es tajante al prohibir cualquier pago y que estipula que al menos uno de los dos miembros de la pareja debe ser tailandés para acceder a este sistema.
Las personas no residentes en Tailandia también podrán casarse presentando sus documentos de identidad y certificados de soltería, lo que abre la posibilidad a parejas de los más de 150 países en los que estas uniones siguen siendo imposibles o penalizadas.