EE.UU. sufrió una derrota en la ONU al no conseguir imponer su resolución sobre Ucrania
EE.UU. había contraprogramado una resolución que hablaba de un genérico “conflicto entre Rusia y Ucrania” y pedía urgentes negociaciones de paz, sin condenar de ningún modo a Rusia.

USA5619. NACIONES UNIDAS (NY, EEUU), 10/06/2024.- Fotografía cedida por la ONU donde aparece el pleno del Consejo de Seguridad durante la votación sobre el alto del fuego en Gaza, este lunes en la sede del organismo internacional en Nueva York (EEUU). El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó hoy una resolución presentada por Estados Unidos de apoyo a la propuesta de tregua que dio a conocer el presidente Joe Biden el 31 de mayo, en la que se establece un plan de tres fases para poner fin a la guerra en Gaza. EFE/Eskinder Debebe/ONU /SOLO USO EDITORIAL/SOLO DISPONIBLE PARA ILUSTRAR LA NOTICIA QUE ACOMPAÑA (CRÉDITO OBLIGATORIO) / Eskinder Debebe/ONU (EFE)
La nueva postura de Estados Unidos con respecto a la guerra en Ucrania —de la que hoy se cumplen tres años— sufrió este lunes 24 de febrero una sonora derrota en Naciones Unidas, donde la Asamblea General aprobó dos resoluciones que no satisficieron a la diplomacia estadounidense, que terminó por votar contra la primera y se abstuvo en la segunda.
La sesión de hoy se veía como un ‘termómetro’ para medir el apoyo que suscita la nueva postura de la Administración Trump —más cercana a Rusia y que pretende negociar la paz en Ucrania sin ni siquiera contar con Kiev—, enfrentada en esta ocasión abiertamente a sus aliados europeos de antaño.
Lea también:
El enfrentamiento ha sido tan abierto que en los momentos previos a la votación la representante interina de EE.UU., Dorothy Shea, llegó a pedir desde la tribuna que Ucrania retirara su resolución —copatrocinada por más de 50 países, entre ellos casi todos los de la Unión Europea— “en favor de una declaración enérgica que nos comprometa a terminar la guerra”, expresó.
EE.UU. había contraprogramado una resolución muy breve que hablaba de un genérico “conflicto entre Rusia y Ucrania” y pedía urgentes negociaciones de paz, sin condenar de ningún modo a Rusia, pero los países europeos introdujeron a última hora tres enmiendas que fueron aprobadas por mayoría y que desnaturalizaban por completo la resolución estadounidense.
Esas tres enmiendas incluían una mención a la “invasión a gran escala de Ucrania” por las fuerzas rusas, pedía “una paz justa, duradera y completa de acuerdo con la Carta de Naciones Unidas” y exigía respetar “la soberanía e integridad territorial de Ucrania”.
En el momento de aprobarse las enmiendas, la delegación ucraniana mostró efusivamente su satisfacción, en medio de aplausos. En contraste, las cámaras mostraron a las delegaciones de Rusia y Estados Unidos, ambas claramente desconcertadas por el rumbo de los acontecimientos.
Fue tal el nuevo sentido introducido por las tres enmiendas que Estados Unidos terminó absteniéndose de su propia resolución, aprobada por 93 votos a favor, ocho en contra y 73 abstenciones.
Parecidas cifras logró la resolución ucraniana, ya que recogía básicamente las mismas ideas.
Un apoyo decreciente con respecto a años anteriores
Sin embargo, las votaciones de hoy no pueden ocultar un hecho, y es que el apoyo diplomático a Ucrania en sus exigencias a un retorno al ‘statu quo’ anterior a la guerra -es decir, retirada completa de Rusia y rendición de cuentas- ya no cosecha el mismo apoyo aplastante que en anteriores ocasiones logró en esta misma Asamblea General.
Así, las votaciones celebradas en 2022 y 2023 en esta misma Asamblea lograron un apoyo rotundo para Ucrania de 141 países (de los 193 que componen la ONU), en momentos en que Estados Unidos y la Unión Europea iban de la mano en su apoyo inquebrantable a Ucrania.
Fuentes diplomáticas dijeron a EFE que se esperaba que la nueva postura de la Administración Trump arrastrara a muchos países del ‘sur global’ a posturas más tibias con Ucrania, a lo que se une la sensación en gran parte de África y Asia de que hay un ‘doble rasero’ cuando se trata de Ucrania o de Gaza.
En las votaciones de hoy, potencias como China e India, y países como Brasil, Colombia, Arabia Saudí o Pakistán optaron por abstenerse, dejando varios de ellos en la sala constancia de que es necesario avanzar en una negociación por el fin de la guerra para salir de la mera repetición de fórmulas retóricas.
Además, Hungría rompió la unidad europea y votó contra Ucrania.
Esta misma tarde, Estados Unidos vuelve a presentar su resolución (sin enmiendas) ante el Consejo de Seguridad en otra sesión específica sobre Ucrania.
La suerte de esa resolución podría ser muy distinta, pues necesita nueve votos favorables (de 15) y que ningún país con derecho a veto lo use contra Estados Unidos.
¿Harán uso Francia o el Reino Unido —tradicional aliado diplomático de EE.UU.— del derecho de veto? ¿Se permitirán incomodar a Donald Trump?